Cuando un caballo arde en el Ocaso
…sin luz y a oscuras viviendo.
San Juan de la Cruz
Para Jorge Perugorría.
Cuando un caballo arde en el ocaso
su resplandor no ilumina.
Se quiebra en rocío y altos pétalos
de sangre.
Las crines graban en el rostro
su gran relincho… Y el fuego
se encastra como la cabeza de un descomunal
pez en la quinta Casa del Placer.
Las coces tristes
caen también sobre el Horizonte.
1992, Centro Habana. Agosto 13.