Alberto Curbelo
Por Omar Perdomo
Alberto Curbelo (Camagüey, 1957), poeta, dramaturgo, narrador y crítico literario, residente en la capital desde hace varios años, está por publicar su primer libro; pero, por fortuna, ya Ediciones Extramuros tiene en perspectiva un cuaderno suyo de poemas: Fin de Otoño, que reúne una buena parte de su labor de creación entre 1977 y 1987.
Miembro de la Asociación Hermanos Saíz, de la Asociación Cubana de Compositores y Autores Musicales, y del Taller Literario Municipal «Aracelio Iglesias» de La Habana Vieja, el joven escritor ha sido merecedor de más de veinte distinciones literarias nacionales, entre éstos, el premio de cuento del concurso La Mujer en la Revolución (1975), los de poesía y cuento Mirta Aguirre (1984y 1986), así como menciones en los concursos La Edad de Oro, El Caimán Barbudo, 13 de marzo y Aniversario de Juventud Rebelde.
El pasado año apareció en la selección de poesía cubana Como jamás tan vivo (Editora Abril), preparado por Waldo González López en homenaje al Che. En 1986, el grupo teatral Aniquilé escenificó su obra para niños El Jigüe.
De Fin de Otoño es este poema inédito:
Allí donde la nada crece
Allí, donde la nada crece,
¿quién ata sus manos y ojos
a la intemperie de la piel?
¿Quién desgarra
el aire, la razón, los pezones
encumbrados en los escombros
de la intemperancia?
¿Qué varita mágica trastocó,
poro a poro, su diamante negro?
¿Y la espada
qué fue de ella, allá, lejos,
donde el placer furtivo
prende la hoguera?
¿Qué fue del fuego, di, qué fue del fuego?
Periódico Tribuna de La Habana, 7 de agosto de 1988
